4 huevos
200 gr de azúcar
16 gr de levadura royal ( 1 sobre)
265 gr de harina
265 gr de cacao soluble estilo Nesquik
250 ml de aceite
250 ml de leche
En primer lugar enmantequillaremos y enharinaremos el molde desmontable que vayamos a usar y encenderemos el horno a 180.
En un bol pondremos los huevos y el azúcar, y batiremos hasta que blanqueen y doblen o tripliquen su volumen.
Mientras, en otro bol más pequeño mezclaremos la levadura y la harina. Incorporaremos la leche, el aceite, el cacao tamizado y la mezcla de harina y levadura química, tamizada también.
Con una cuchara de madera o lengua de silicona mezclaremos todos los ingredientes, lentamente y con movimientos envolventes, hasta que se integre todo. Lo verteremos todo en el molde que teníamos reservado.
Meteremos en el horno por 40 - 45 minutos. Pincharemos con un palillo en el centro para ver si está hecho y, si es así (el palillo sale limpio), sacaremos del horno y dejaremos reposar en el molde por unos 10 minutos.
Desmoldaremos y, para terminar, sólo nos quedará disfrutar de su sabor y textura esponjosa. Ideal para merendar y/o desayunar.
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